Dubai, emporio comercial del medio oriente, se alza como una ciudad llena de virtudes. Nombre comercial y atrayente, gobiernos dedicados al aprovechamiento y cuidado de los recursos, gran seguridad, entorno multicultural y multiracial. Esta ciudad pareciera que no tiene límites.
Aún a pesar de la gran crisis mundial esta ciudad no para.
Cuando llegas y te encuentras con las construcciones del metro de Dubai y la torre Burj Dubai quedas maravillado. Contingentes enormes de personas trabajando en todas partes, bellos centros comerciales llenos, de gente y de productos. Una vialidad envidiable y pare usted de contar.
Dubai, la grande, parece destinada a un futuro brillante, además con el respaldo de la rica Abu Dhabi y del gobierno federal se siente que la riqueza petrolera ayudará a mantener su éxito y crecimiento.
Grandes nombres de grandes empresas se establecen cada día aquí por lo que representa para el medio oriente y el asia en su totalidad, por la seguridad para las inversiones, por la estabilidad política y social y por los recursos con que cuenta. Cuando esta crisis económica comience a dar signos de finalización debemos tener pendientes a Dubai como destino cierto y puerto seguro.
martes, 24 de marzo de 2009
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